El iPhone 8 podría estrenar un sistema de reconocimiento facial para su seguridad
Ya con el iPhone 7 la compañía de Cupertino –aunque no lo parezca- ha dado un importante salto en diseño que ha afectado de forma directa al sistema de seguridad que incorporan sus teléfonos inteligentes. Ha sido el primer cambio sobre el botón Touch ID desde el lanzamiento del iPhone 5s, que supuso otro cambio radical con la llegada del sensor de huellas dactilares. Pero con el iPhone 8 se reducirán los marcos de pantalla, y esto propone nuevos retos para el fabricante cofundado por Steve Jobs, y el reconocimiento facial suena como una posibilidad para él.
En algunos aspectos Apple nos ha acostumbrado a no ir a la vanguardia. Uno de ellos es el tamaño de pantalla, que se mantuvo en 4 pulgadas de diagonal como máximo hasta el iPhone 5s, y al fin con los siguientes subió hasta las 4,7 y 5,5 pulgadas que actualmente se mantienen. Una buena evolución, pero que se ha extendido hasta los iPhone 7 con grandes marcos de pantalla y, además con paneles tipo IPS. La tendencia es aprovechar paneles OLED, y este es uno de los movimientos que permitirá reducir los marcos en el iPhone 8, su grosor, y también apostar por un nuevo diseño gracias a la flexibilidad de la pantalla, con el sensor de huellas dactilares bajo la pantalla.
Un nuevo Touch ID y reconocimiento facial para el iPhone 8, y todo en el aire por las posibilidades de su diseño
El cambio de diseño, ese esperado cambio de diseño que no se dio con el iPhone 7, condicionará de forma importante qué tecnología se utilizará para la seguridad de los nuevos teléfonos inteligentes de Apple, o al menos así lo asegura la información más reciente en torno al iPhone 8. El hecho de que vayan a utilizar una pantalla con panel OLED flexible parece evidente, pero el problema está en sustituir el sensor capacitivo en el botón Touch ID por tecnología óptica, algo que se tendría que diseñar específicamente para Apple y que, por lo tanto, supone una importante traba. Es posible, evidentemente, pero dificultaría y encarecería de forma notable su desarrollo.
En estos términos, se apuesta por la posibilidad de que el sensor de huellas dactilares se integre bajo la pantalla, aprovechando las capacidades de la tecnología 3D Touch para dar la sensación de botón físico, y que se introduzca además una nueva tecnología de reconocimiento facial. Es decir, que se mejoraría el reconocimiento del usuario a través de la huella dactilar, con un ‘botón’ bajo la pantalla y tecnología óptica, y de una forma similar a los sistemas de autenticación en dos factores, se sumaría el reconocimiento facial para la verificación de la identidad del usuario.
Via: www.adslzone.net