¿Cómo funciona el cifrado? Así se protegen nuestras conversaciones
En aplicaciones de mensajería instantánea como es el caso de WhatsApp, y otras similares para dispositivos móviles, se utiliza una tecnología denominada cifrado. Pero no es en el único ‘sitio’ de Internet donde podemos encontrarlo, sino que también se cifran, por ejemplo, las transacciones bancarias en tiendas online o incluso en la propia página web de nuestro banco. Y esto se hace, como es evidente, para evitar que ‘otros’ vean nuestros datos, los datos que intercambiamos a través de Internet. Pero ¿cómo funciona el cifrado?
El cifrado se utiliza en servicios de Internet para proteger el intercambio de datos entre un cliente –nosotros, nuestro ordenador- y el servidor –la página de Internet que consultamos-. Pero también se puede utilizar para proteger intercambios de información entre clientes, con un servidor de intermediario que, únicamente, hace las veces de ‘puente’ en la comunicación entre ambos clientes. La relación cliente – servidor es la que llevamos a cabo con nuestra entidad bancaria, por ejemplo, mientras que una relación cliente – cliente, o más bien cliente – servidor – cliente, es la que se lleva a cabo en aplicaciones como, por ejemplo, WhatsApp. Y en este último caso, hablamos de un cifrado de extremo a extremo, sin que en el servidor se pueda comprobar la información protegida e intercambiada entre los clientes.
¿Cómo funciona el cifrado de datos? Así es como se protegen nuestras conversaciones en Internet
El cifrado de datos funciona según fórmulas matemáticas complejas, y basándose en dos sistemas diferentes. Se puede emplear un sistema simétrico que emplea exactamente la misma clave para el cifrado y descifrado de datos, y que debe ser conocida por todas las partes para desproteger la información. Pero también se puede emplear un sistema asimétrico que cifra mensajes con una clave pública y otra clave privada que sólo el receptor tiene. Este segundo sistema es el que se utiliza en aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp.
Es evidente que el punto esencial, del que depende la seguridad real de un sistema de cifrado, está en las claves que se utilizan para ello. Actualmente el cifrado AES es el más habitual, y se basa en claves de 256 bits. Este sistema, denominado Advanced Encryption, se considera uno de los más seguros y consiste en la división de los datos en una enorme cantidad de bloques pequeños y su combinación aleatoria. Para resolver un cifrado de este tipo haría falta un superordenador, y aún así el tiempo requerido para encontrar la clave es increíblemente alto.
Via: www.adslzone.net