Donald Trump lleva, apenas, dos semanas en el cargo de presidente de los EE.UU. y no deja de causar controversia. Las principales firmas de Silicon Valley ya criticaron su veto a los inmigrantes de ciertos países, pero es Apple la que está pensando en llevar el caso ante los tribunales.

El nuevo presidente de los EE.UU., Donald Trump, si algo no va a hacer es aburrirnos. Uno de sus primeros decretos ha sido vetar la entrada y el visado a inmigrantes de ciertos países, algo que ha conseguido el aplauso de sus seguidores pero enormes críticas en muchos sectores, incluyendo el empresarial.

La semana pasada, Facebook, Google y Apple, entre otras muchas empresas estadounidenses que tienen gran parte de su plantilla – y algunos de sus mejores cerebros – formados por inmigrantes criticaban duramente la decisión de la Casa Blanca. Pero ha sido Tim Cook, en una entrevista para The Wall Street Journal, quien ha cargado duramente hoy contra el veo a siete países musulmanes, entre ellos Siria, dado que es una decisión que afecta gravemente a cientos de empresas que ahora se ven con problemas para gestionar los visados de sus empleados – la normativa afecta a los que intentan entrar, pero también a los que están -.

Cook indica que ha contactado con altos miembros de la Casa Blanca, para intentar persuadirles para presionar a la administración estadounidense para que revoquen la orden de Trump. Es cuando ha hecho la declaración más importante y es que según el CEO de Apple – que hoy ha visto como Google la superaba como empresa más valorada del mundo de nuevo -, no descartan la posibilidad de acudir a demandas y acciones legales si la Administración continúa firme en su decisión.

El máximo directivo de Apple ha recordado que más que en ningún otro país del mundo, EE.UU. es fuerte por el entramado de inmigrantes y nuestra capacidad para acoger a gente de todo el mundo y todos los perfiles. “Es lo que nos hace especiales” indicaba Tim Cook. Ademas, ha añadido que la compañía duplicará la aportación que cada uno de sus empleados haga a alguna organización de ayuda a los refugiados, lo que triplicará la cantidad que se donaría en un primer momento.

Reacción de Trump a las críticas: “os aguantáis”

Hemos dicho al comienzo que con Donald Trump no nos vamos a aburrir, y así es. El presidente de EE.UU. que sigue usando su vieja cuenta de Twitter en lugar de la oficial (@POTUS) no ha tardado en dar su opinión.

Everybody is arguing whether or not it is a BAN. Call it what you want, it is about keeping bad people (with bad intentions) out of country!

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) February 1, 2017

Trump puede que tenga apoyos, los mismos que lo llevaron hasta la Casa Blanca, pero parece que se está haciendo un importante lobby en contra. Google salía a la calle, o al menos sus empleados, el pasado lunes para manifestarse, incluyendo a Sergei Brin y Sundar Pichai. Microsoft y Amazon ya han indicado que están en contra y que apoyan, por su parte, una demanda contra la orden de Donald Trump que ha cursado el Fiscal General de Washington, Bob Ferguson.

Silicon Valley, en contra de Trump por motivos ideológicos… y económicos

Es evidente que las empresas tecnológicas, además de sus ideas, tienen intereses económicos importantes en el tema. No vamos a descubrir nada si decimos que estas compañías han basado su éxito en la captación y formación de talento que, debido a esta normativa, puede escaparsele entre los dedos y suponer un problema para ciertos proyectos si en ellos estaban implicados como piezas claves algún empleado especialmente brillante que, para Trump, no debería estar en suelo estadounidense.