Doble noticia alentadora para el 5G en el día de hoy. Si hace unas horas nos hacíamos eco de las nuevas reglas mínimas que tenían que seguir los fabricantes para implementar el 5G en sus dispositivos como móviles o routers, ahora hemos conocido que el Gobierno ha aprobado el nuevo reglamento para favorecer el despliegue de las redes 5G en España de cara a los próximos años. El 5G supondrá una auténtica revolución en la conectividad inalámbrica a nivel mundial, ya sea en móviles, coches, o dispositivos del Internet de las Cosas (IoT).

El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital ha anunciado en un comunicado este nuevo “Reglamento sobre el uso del dominio público radioeléctrico”, que permitirá a los operadores españoles realizar un uso más flexible, eficiente y racional del espectro radiofónico mediante la mutualización del mismo. Gracias a ello, podrán poner en común sus derechos y ofrecer mejor cobertura y velocidad a los usuarios.

Simplificar procedimientos y eliminar cargas administrativas para el despliegue del 5G

Uno de los factores que más han destacado desde el Ministerio ha sido que el nuevo reglamento permitirá eliminar cargas administrativas innecesarias para facilitar la instalación de nuevos dispositivos de conectividad 5G. A su vez, también simplifican y acortan los procedimientos para obtener licencias y autorizaciones de uso de las frecuencias, asegurando que los servicios funcionen sin interferencias y que cumplan con los niveles de exposición radioeléctrica para no suponer un peligro para la salud de los ciudadanos.

Este reglamento es uno de los primeros pasos que España da para cumplir con los objetivos que tiene establecidos la Agenda Digital para Europa de cara a que en el año 2020 la entrada del 5G sea lo más sencilla posible a través de las diferentes bandas, donde destacará la apertura de los 700 Mhz, y se potenciará que todos los usuarios tengan de cara al año 2020 una velocidad de acceso a Internet con una velocidad mínima de 30 Mbps.

Es muy importante que el 5G se implante sin que interfiera con otros servicios de telecomunicaciones que utilizan el espectro radioeléctrico, como la telefonía móvil, servicios de seguridad, de transporte, la radio, la televisión, o la propia conexión WiFi de un hogar, que se ve afectada cuanto mayor es el número de redes a su alrededor operando en la misma frecuencia. Este ha sido uno de los objetivos principales de la reglamentación, con el fin de evitar problemas futuros de conexión.

El 5G, además de operar en la banda de los 700 MHz, también operará en bandas de frecuencias superiores, por lo que será necesario un mayor número de puntos de acceso para ofrecer el mismo alcance en ciudades o en núcleos urbanos donde operen estas bandas. Es por ello que veremos cómo se irán implantando estas antenas en todo tipo de zonas, como farolas o marquesinas de paradas de autobús, con el fin de hacer frente a la gran cantidad de dispositivos que estarán conectados a la red.