Alemania quiere que los operadores garanticen la velocidad que los usuarios contratan
Cuando contratamos una línea de ADSL, en los anuncios vemos que se nos garantiza un “hasta” 20 o 30 MB, siendo normalmente la velocidad menor, o mucho menor en el caso de algunos pueblos, a lo que se anuncia. En el caso del 10% de la población, esa velocidad es inferior a los 4 Mbps. En 600.000 hogares de España la velocidad de conexión no supera los 2 Mbps, mientras que 2.500 pueblos navegan a menos de 10 Mbps.
La fibra óptica ha acabado con el denostado “hasta”
Por suerte, la llegada de la fibra óptica ha acabado con este problema en España, donde la velocidad que se oferta es la que realmente llega al hogar, ya sea 50 o 300 Mbps. De hecho, en algunas ocasiones, las pruebas de velocidad como Test de Velocidad, llegan a marcar una velocidad ligeramente superior. Por ello, cada vez esto es algo que preocupa menos a los usuarios que contratan fibra óptica, aunque no así para los que contratan ADSL o incluso cable.
Ese es el caso de Alemania, donde la Agencia Federal de Redes (Bundesnetzagentur), la CNMC alemana, ha propuesto una consulta para aprobar nuevas reglas para determinar si los usuarios que contraten banda ancha fija deben ser compensados si no reciben la velocidad de conexión que promete su operador al contratar la línea.
Esta medida llegaría dentro del marco de las nuevas reglas sobre la neutralidad en la red que ha impuesto la Unión Europea, que establecen que los operadores deben informar de la velocidad mínima, máxima y media disponible normalmente para el consumidor en la zona donde va a contratar la línea.
Condiciones para justificar que el operador no ofrece la velocidad contratada
La consulta que la Agencia Federal de Redes ha abierto quiere definir los conceptos legales que se usarán en el caso de que un consumidor quiera interponer una queja por tener una velocidad de conexión demasiado baja con respecto a lo que promocionaba el operador, incluyendo en esas reglas cómo han de ser medidas las velocidades y cómo han de ser expresadas.
Para ello, La Agencia creará un programa para que los usuarios midan la velocidad de su conexión, y siempre a través de una conexión cableada para asegurar las mejores condiciones. Será necesario realizar al menos 20 mediciones en dos días diferentes para poder aceptar el caso. Sólo se justificaría que el operador no ofrece la velocidad contratada si en ninguna medición se consigue alcanzar el 90% de la velocidad publicitada. También estaría justificado si la velocidad no se alcanza en el 90% de los casos en los que se realicen las mediciones, así como si la velocidad mínima que aseguró el operador en el contrato tampoco se alcanza.
La situación de Alemania es similar a lo que encontramos en España, donde las velocidades ADSL suelen quedar algo lejos de lo que se menciona en los contratos para la mayoría de usuarios del país. Sólo la mitad de los usuarios que tienen contratada banda ancha alcanzan al menos el 60% de la velocidad máxima publicitada por el operador.
Via: www.adslzone.net