La administración Trump sigue estrechando el cerco contra todo lo que venga desde fuera de sus fronteras. En los últimos meses hemos visto prohibiciones y movimientos de todos los colores, aunque ahora podría realizarse uno que nos afectaría directamente a los europeos. Concretamente, hablamos de la posibilidad que considera Estados Unidos de prohibir los portátiles en cabina en los vuelos desde Europa.

La administración Trump estaría considerando prohibir los portátiles en los vuelos procedentes de Reino Unido con destino Estados Unidos, aunque es una medida que también podría llegar algo más adelante al resto de vuelos procedentes de aeropuertos europeos. Según publica The Guardian, el gobierno de los Estados Unidos planea realizar algo parecido a la prohibición de llevar tabletas o portátiles por parte de los viajeros procedentes de varios países de oriente medio.

A Estados Unidos sin portátil en cabina

El movimiento podría ser especialmente duro para los usuarios que aprovechan los vuelos para trabajar o para el ocio, teniendo que llevar estos dispositivos obligatoriamente en la bodega del avión facturados. La prohibición aplicada en Oriente Medio de llevar en cabina cualquier dispositivo de mayores dimensiones que un smartphone, es decir, un tableta o portátil, podría dar el salto pronto a otros destinos europeos.

Hasta ahora, la prohibición aplica a los vuelos procedentes de Egipto, Jordania, Kuwait, Marruecos, Qatar, Turquía, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos, aunque pronto empezaría a aplicar en Reino Unido en primer lugar, y en el resto de países europeos en segundo lugar.

La directiva de la TSA (US Transportation Safety Administration) es válida hasta el 14 de octubre y está motivada por la sospecha de la inteligencia americana de que los terroristas podrían transportar explosivos de contrabando en diversos objetos cotidianos de consumo, principalmente gadgets electrónicos.

Reino Unido también ha tomado una decisión similar al prohibir los dispositivos electrónicos en los vuelos procedentes de Egipto, Jordania, Líbano, Arabia Saudita, Túnez y Turquía. Sin embargo, existen diferencias entre Estados Unidos y Reino Unido. En el primero, se prohíbe “cualquier cosa más grande que un smartphone”. En el segundo, tenemos dimensiones específicas que no pueden ser sobrepasadas.

No obstante, muchos señalan la ineficacia de esta medida. Según una investigación de la Universidad de Berkeley, si un atacante está interesado en convertir un portátil en una bomba, daría igual si está en cabina o en bodega.