Los Ubuntu Phone dejarán de tener actualizaciones de seguridad en junio
Cuando a principios de año escribí aquello de “Ubuntu Phone 2017: nada que ver, circulen!”, no me esperaba que un par de meses estaría hablando de la defunción del proyecto, y ahora del abandono de su soporte en un tiempo record.
Una medida que afecta a todos aquellos, que hayan comprado un dispositivo móvil con el sistema de Canonical. Smartphones como el Meizu MX4 , Meizu PRO 5 o Bq Aquaris 4.5, así como a los usuarios de la tablet BQ Aquaris M10.
Según nos adelanta Bryan Lunduke en NetwordWorld, las actualizaciones de seguridad y soluciones de problemas críticos finalizan el próximo de junio. De igual manera la comercialización de aplicaciones se detiene en dicha fecha.
Los usuarios de algunas de las tablets o móviles impulsados por el sistema de Canonical, todavía podrán descargarse aplicaciones desde la tienda oficial. Mientras que los desarrolladores tendrán que optar –ya a partir de junio– entre ofrecer sus apps de pago gratuitas o bien retirarlas.
Pero la alegría durará solo hasta final de año, fecha prevista para el cierre definitivo de la Ubuntu App Store.
Malas noticias por tanto para aquellos usuarios que se habían comprado un Ubuntu Phone, los cuales seguirá funcionando correctamente, pero no recibirán mejoras ni correcciones de seguridad.
Tampoco es algo excepcional en la industria móvil, la mayoría de dispositivos Android están en la misma situación, por la deficiente política de actualizaciones de muchos fabricantes. Pero si duda eso no era lo que esperaba la gente cuando compró un Ubuntu Phone y ese mal de muchos, no sirve de demasiado consuelo.
Queda todavía un pequeño rayo de esperanza, centrado en la comunidad de UBports, los cuales intentarán mantener vivo en proyecto y que dichos móviles no se conviertan unicamente en –apreciadas– piezas para coleccionistas.
Un decisión de Canonical que aunque sorprende algo por su inmediatez. ya era esperada. Ahora los objetivos son otros: la nube, el internet de las cosas y mantener ese escaparate que supone ser la distribución GNU/Linux más popular en el escritorio.
Pero eso si, sin esfuerzos adicionales y con un enfoque mas vanilla, nada de “Unities” ni “Mirs”.
Via: lamiradadelreplicante.com