Europa dictaminó en abril que  vender dispositivos Kodi o similares preconfigurados para ver canales de pago ‘pirata’ es ilegal. Esta sentencia elevó al máximo la presión sobre estos aparatos pre-configurados para ver canales de pago de forma gratuita. Además, ha demostrado ser bastante eficaz ya que 200 vendedores de aparatos Kodi “preparados” habrían cesado su actividad tras la sentencia europea.

El grupo anti-piratería holandés BREIN, uno de los más activos del mundo, acaba de informar del éxito de la sentencia dictaminada por la Corte Europea de Justicia el pasado mes de abril. Hasta 200 vendedores de estos aparatos Kodi “preparados” habrían cesado su actividad de venta desde entonces.

La venta de aparatos Kodi “preparados” en peligro de extinción

Lo cierto es que la popularidad de estos dispositivos se ha disparado en el último año y medio. De la nada, se creó un importante mercado que muchos usuarios han aprovechado para hacerse con uno de estos dispositivos que les daban acceso a contenidos de pago. Además, el boca a boca ha sido crucial para elevar al máximo su popularidad.

La cosa llegó a tal punto que la Justicia Europea tuvo que pronunciarse al respecto y prohibir su venta. Algunas semanas antes, tiendas online como Amazon, habían dictaminado también que no iban a permitir su venta. Desde ese momento, toda ha caído como un castillo de naipes y es complicado comprar uno de estos equipos “preparados”.

El grupo anti-piratería holandés BREIN confirma ahora que la decisión de la justicia ha sido muy eficaz para detener la venta de estos aparatos. Según sus estimaciones, unos 200 vendedores han cesado su actividad desde el mes de abril. Se trataría tanto de particulares como de empresas especializadas.

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La mayor parte de las ventas se realizaban en Amazon o eBay, aunque también se utilizaban redes sociales como Facebook para ello. Este grupo anti-piratería holandés se habría puesto en contacto con 150 de estos vendedores, remitiéndoles una carta donde se les pide el cese de su actividad. “La mayoría acepta sin más”, explican desde BREIN.

Los que no aceptan, ya no reciben más advertencias y ahora el grupo anti-piratería se prepara para pasar a los juzgados. Todos los que no hayan cesado su actividad se enfrentarán ahora a una denuncia. Como mínimo, pueden enfrentarse a multas de 10000 euros.