Con algo más de calma, pasada la vorágine del E3 2017, hemos tenido nuestro primer acercamiento a los que serán algunos de los títulos más importantes del año, como Super Mario Oddisey, y el resto de novedades que Nintendo mostraba en la feria de Los Ángeles.

Cómo siempre, las presentaciones del E3 2017 de Nintendo, Microsoft o Sony son días en los que vuela la información y no siempre es fácil hacerse una idea de si lo que se ha presentado es tan bueno como nos lo han querido vender.

En este caso, ha sido Nintendo la primera que ha traído a España todo el arsenal de novedades, encabezadas por Super Mario Oddisey, a las que hemos podido ya echar unos minutos a los mandos para traeros lo que son unas pinceladas y primeras impresiones cercanas a lo que pudieron ver los asistentes al E3 2017.

Primer contacto y opinión de Super Mario Oddisey

No vamos a extendernos más en presentaciones, ni tampoco os vamos a presentar los juegos de los que vamos a hablar porque ya estaréis cansados de oírlo. Vamos a entrar directamente en las sensaciones que nos han producido empezando con la joya de la corona para Switch (con permiso de Zelda) este año: Super Mario Oddisey.

La más reciente aventura del bigotudo fontanero llegará el próximo 29 de octubre y pudimos probar dos escenarios, el urbano y el ambientado en el folclore de México. Ambos nos planteaban dos propuestas diferentes que si bien no se podían exprimir al máximo, ofrecían un contacto con las principales mecánicas del juego.

Antes de nada, os confirmamos que este Super Mario Oddisey es mucho más “Sunshine” que “Galaxy”. Es decir, no hablamos de un plataformas donde prima la acción y la pericia sino un sandbox en el que tenemos que visitar, tocar y explorar cada centímetro de los mapas. No es el concepto de Zelda de mundo abierto, es más una sucesión de patios de juego, grandes – y con posibilidades de ampliarse más si encontramos ciertos secretos – donde todo es interactivo.

El objetivo es conseguir cierto numero de lunas para pasar a la siguiente fase pero para ello tenemos que superar retos y puzzles de infinidad de clases. Algunos son simplemente encontrar un objeto, abrir un fase oculta, también tenemos los que suponen pasar a un modo 2D de 8 bits, montarnos en un vehículo, transformarnos, etc. etc. Sólo vimos un resquicio del juego y promete ser enormemente grande en posibilidades.

Por otra parte, está la parte de acción y plataformas, que si bien no es lo primordial, no deja de ser la esencia. Tenemos saltos imposibles, zonas en las que habrá que tener más habilidad para llegar a ellas y, sobre todo, enemigos por el escenario. En este sentido es cuando la gorra – bautizada Cappy para la ocasión – se presenta como el elemento significativo de esta entrega. Es tanto un arma, como un elemento para alcanzar zonas inaccesibles y, finalmente, la interesante opción de poseer a otros enemigos.

Se hace de forma tan simple como lanzarla contra un enemigo y automáticamente nos transformamos en ese persona o, también, en algún objeto del escenario. La máxima es “si no tiene sombrero, puedes transformarte en eso”.

Finalmente, no podemos olvidarnos de la plataforma en la que se va a lanzar, la Nintendo Switch, y como en el caso del Zelda, todo esto lo tendremos en pantalla grande como en modo portátil, donde cuenta con el curioso modo cooperativo en el que un jugador controla a Mario y otro a Cappy. Es una curiosa combinación en la que, bien es cierto, el jugador que tiene al protagonista lleva la voz cantante pero que es un complemento para que si tenemos a alguien con nosotros pueda disfrutar de la partida sin tener que estar simplemente mirando lo que hacemos.

Por último, si separamos los mandos de la Switch y los cogemos cada uno con una mano, contaremos con algún que otro gesto, sobre todo, a la hora de lanzar la gorra. En este sentido, cabe destacar el cuidado que ha puesto Nintendo en aprovechar el sistema de vibración HD para que sintamos que estamos tocando cada elemento del juego.

Opinión de otros lanzamientos de Nintendo en el E3 2017: Mario + Rabbids Kigdom Battle, Pokken Tournament, Splatoon 2, etc…

Aunque Super Mario Oddisey era el gran centro de atención, pudimos también pasar un rato con otros lanzamientos de la compañía. Empezamos por uno que también tiene al fontanero como “excusa”, Mario + Rabbids Kingdom Battle.

La propuesta está totalmente alejada a un plataformas, ya os lo avisamos. Formaremos un equipo con Mario, sus amigos y algunos Rabbids para enfrentarnos a una horda de estos personajes que ha invadido con sus locuras el reino champiñón. La historia es tan absurda y divertida como siempre, y no deja de ser un poco anecdótica dado el tipo de juego que hablamos.

Consta de dos partes bien diferenciada, una de exploración y puzzles a lo largo y ancho de los mapas y el plato fuerte, los combates. Son combates estratégicos por turnos, lo que quiere decir que iremos moviendo nuestro equipo por un campo de juego en cuadriculas, indicándoles órdenes y esperando la respuesta de los enemigos. El estratega más hábil ganará. Además, el componente de RPG se le da que podemos ir mejorando el equipamiento de los personajes que llevamos con nosotros para enfrentarnos a retos cada vez más importantes.

No faltaba a la cita también Splatoon 2 que está a punto de salir al mercado, por lo que ya hay poco que contar de este título más allá de volver con su fórmula de shooter multijugador online “sin balas”. Ahora prima mucho más la capacidad para pintar el escenario que darle a los enemigos y, sobre todo, interesan añadidos como el modo Salmon Rush, una suerte de modo horda cooperativo para 4 jugadores muy, muy, muy difícil.

Aunque no es de Nintendo, entre los presentes estaba, nada menos, que FIFA 18. El título de EA Sports que ya se comentó que no llegaría con el motor Frostbite… pero que para los menos exigentes gráficamente les podemos decir que lucía tremendamente bien en pantalla grande y, en portátil, es la mejor experiencia de FIFA que podrán encontrar hasta la fecha. 

Pokemon Tournament, la versión del título de lucha para Wii U repite en Switch dentro de poco y cuenta con las mismas prestaciones además de algún que otro personaje nuevo, pero realmente lo que también destacó del evento es un título que, por otra parte, es el único que sólo vimos en funcionamiento pero no pudimos probar: Metroid: Samus Returns.

El remake de Metroid 2 para Nintendo 3DS ha sido creado desde cero y aunque disfrutarais del juego de Game Boy, llega con muchas novedades. Tomando la base de la historia de este se han adaptado no solo los gráficos a una nueva generación sino también se han añadido numerosas mecánicas (apuntado en 360º, posibilidad de colgarse de las esquinas, el mapa que no estaba en Metroid 2, etc.). Los primeros minutos mostrados del juego, con un aspecto sonoro realmente destacado, nos muestran un juego que si bien traerá recuerdos a los que lo jugaron en su día, ofrecerá una nueva experiencia para estos y los que lo prueben desde el primer día.