Cada vez los dispositivos están más interconectados entre sí. Conectar una tablet a una red Wi-Fi, unos cascos bluetooth a nuestro teléfono, un ratón inalámbrico a nuestro ordenador o un mando a una videoconsola, todo ello se realiza con distintos protocolos. Uno de los protocolos más utilizados en el día a día es el Bluetooth, que nos permite conectar todo tipo de dispositivos entre sí para que se comuniquen entre ellos, sin embargo, existen otros protocolos muy interesantes que, aunque suelen estar en segundo plano, son protocolos muy prácticos que también debemos conocer, como el ANT+.

ANT+ es un protocolo pensado para conectar dos dispositivos entre sí de la forma más sencilla posible, sin complicaciones, y hacer que los dispositivos solo compartan entre sí la información que necesitan, nada más. Mientras que el Bluetooth se utiliza para conectar entre sí todo tipo de dispositivos, el protocolo ANT+ se utiliza, generalmente, en dispositivos relacionados con el deporte, como podómetros, pulsómetros y otros dispositivos que recogen información sobre nuestra actividad.

Algunos ejemplos de dispositivos compatibles con este protocolo son:

• Cintas para el pecho que nos miden el pulso y ritmo cardiaco.

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• Relojes y pulseras relacionadas con el ejercicio.

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También podemos encontrar otros dispositivos que funcionan a través de este protocolo, como, por ejemplo:

• Velocímetros para bicicletas.

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• Sensores de cadencia.

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Este protocolo es capaz de funcionar con varias conexiones al mismo tiempo. Por ejemplo, si tenemos un monitor para una bicicleta, es posible utilizar al mismo tiempo un medidor de cadencia, un velocímetro y un medidor de pulso y que el monitor nos muestra la información de los 3 dispositivos al mismo tiempo.

¿Qué necesitamos para poder utilizar ANT+?

Igual que con cualquier otro protocolo, lo imprescindible para poder conectar dos dispositivos a través de este protocolo es que ambos dispositivos sean compatibles con él. Muchos smartphones, por ejemplo, funcionan a través de este protocolo, igual que muchos otros dispositivos.

Además, si queremos conectar cualquier dispositivo ANT+ a un ordenador, en Amazon mismamente podemos encontrar adaptadores USB que nos van a permitir hacer uso de este protocolo directamente en nuestro ordenador. Si nuestro smartphone no tiene un chip para este estándar, lo podemos utilizar gracias a un cable OTG y uno de estos USB para PC.

Una vez que nos hemos asegurado de que ambos protocolos son compatibles, lo único que nos queda es utilizar la aplicación adecuada que cuente con soporte para este protocolo de manera que pueda utilizar sus servicios y establecer la comunicación directa con el dispositivo en cuestión.

Entonces, ¿es mejor el Bluetooth o el ANT+?

No podemos decir que un protocolo sea mejor que otro, porque son estándares totalmente diferentes y creados con distintas finalidades. Mientras que el Bluetooth está diseñado para conectar cualquier dispositivo, ANT+ está claramente enfocado al deporte, y lo principal, cuando alguien hace deporte, es poder conectar los dispositivos rápidamente, de forma sencilla y tenerlo todo funcionando en el menor tiempo posible.

Si lo que queremos es algo que funcione con cualquier dispositivo, el Bluetooth es, sin duda, el protocolo más completo en cuanto a compatibilidad.

Si lo que queremos es que nuestro móvil sea un todo-en-uno para el deporte, podemos conectar dispositivos ANT+ que controlen nuestra actividad, y después, unos cascos para escuchar música a través de Bluetooth.

¿Utilizas algún dispositivo compatible con este protocolo?