Cada vez más víctimas de ransomware deciden pagar el rescate
El ransomware ha sido la peor amenaza informática de 2016, y va camino de ser una de las peores también en 2017. Cuando este tipo de malware infecta nuestro ordenador, automáticamente empieza a cifrar todos los datos de la víctima para, después, pedir el pago de un rescate a cambio de la clave que permita, con suerte, recuperar los datos.
Los ataques informáticos con ransomware están al alza. Cada vez hay más variantes de ransomware, con algoritmos de cifrado diferentes, circulando por la red en busca de infectar a cualquier víctima para intentar cobrar el rescate a cambio de la clave.
A lo largo de 2016, solo algunos pocos usuarios cedían al chantaje de los piratas informáticos, ya fuera porque el precio que se pedía por los datos era muy elevado o porque al poco tiempo aparecían herramientas gratuitas, desarrolladas por las diferentes firmas de seguridad, que nos permiten recuperar nuestros datos de forma gratuita.
Sin embargo, en 2017 el ransomware ha seguido creciendo y haciéndose cada vez más peligroso y agresivo. WannaCry, Petya o el nuevo Bad Rabbit son amenazas que han puesto en jaque la seguridad de usuarios de todo el mundo, amenazas cada vez más complicadas de detectar, más fáciles de infectarse y más complicadas de descifrar, en caso de que caigamos víctimas de ellas.
Las complejas amenazas de ransomware de hoy en día hacen que cada vez más usuarios terminen pagando el rescate
Según asegura el FBI, se calcula que para cuando acabe 2017, dentro de dos meses, a lo largo de todo el año los piratas informáticos habrán recaudado más de 5.000 millones de dólares, lo que supone un aumento de más de 15 veces respecto a todo el 2016, donde los piratas recaudaron “solo” 325 millones de dólares.
La media que piden hoy en día los piratas informáticos es de unos 1400 dólares, precio que debe pagarse en forma de Bitcoin desde la propia herramienta o web de pago, distribuida y oculta en la red Tor.
Además de a los usuarios convencionales, las empresas son las más vulnerables a este tipo de amenaza, ya que la mayoría de los empleados no sabe lo que es el ransomware ni cómo defenderse de esta amenaza. Por ello, una breve formación en materia de seguridad informática podría ahorrar a las empresas miles de dólares que tendrían que pagar en caso de que un ransomware infecte sus sistemas.
Cómo protegernos del ransomware
Ningún usuario es invulnerable al ransomware. Ya sea utilizando Windows, Linux, macOS o sistemas móviles como Android o iOS, todos los sistemas tienen su ración de ransomware, aunque las más frecuentes son las de Windows y Android al ser los sistemas operativos más utilizados.
Los antivirus comerciales de hoy en día no son eficaces contra el ransomware, por lo que la mejor forma de protegernos de esta amenaza no es instalando un antivirus y olvidándonos, sino que es muy importante mantener nuestro software (sistema operativo, aplicaciones, etc) actualizado a las últimas versiones y utilizar el sentido común, especialmente con los archivos adjuntos que vienen en el correo electrónico y los archivos que podemos descargar de la web, de páginas que no sean de confianza.
Las copias de seguridad de nuestros datos más importantes también nos permitirán recuperarnos de la amenaza.
Os recordamos, además, que Windows 10 Fall Creators Update cuenta con una nueva función que nos permite protegernos del ransomware controlando los cambios no autorizados de las carpetas.
¿Qué opinas sobre el ransomware? ¿Pagarías por recuperar tus datos?
Via: www.redeszone.net