Llevamos tiempo hablando de que los operadores se preparan para abandonar definitivamente el fútbol de pago debido al insostenible negocio que se ha creado en torno a los derechos de las principales competiciones. Sin embargo, todo apunta a que realizarán un último intento para seguir ofreciendo este llamativo contenido a sus clientes. La bala final llegará en forma de negociación a la baja de los precios de las próximas ediciones de la Champions League.

Antonio Lorenzo explica en elEconomista que los operadores de televisión de pago no van a tirar la casa por la ventana a la hora de hacerse con los derechos para emitir las próximas temporadas de la Champions League. Como ya os hemos explicado, Mediapro se ha quedado con los derechos de la Champions League para las temporadas 2018-2019, 2019-2020 y 2020-202 a cambio de más de 1100 millones de euros, una cantidad muy por encima de lo pagado por los derechos actuales.

Última bala de los operadores para el fútbol: negociar a la baja los derechos

Los operadores son conscientes de que no pueden tener el fútbol al precio que están pagando en estos momentos, pero también saben que será complicado no tener este aliciente para publicitar sus ofertas. De hecho, van a intentar negociar por los derechos de las próximas ediciones de la Champions League, pero a la baja.

Al ser inviable cobrar más de 50 euros al mes por este concepto, los operadores han aprendido de los errores del pasado. Quieren la Champions League, pero no quieren comprometer sus resultados o forzar subidas de precio para equilibrar los elevados costes del deporte rey. De hecho, Movistar se quedó con los derechos de El Partidazo por 750 millones de euros y Mediapro con el resto de LaLiga por 2.400 millones de euros.

En estos momentos, Telefónica realiza una inversión anual de 1050 millones de euros. Para que nos hagamos una idea del montante, necesitaría que sus casi 4 millones de abonados pagaran 23,6 euros al mes por el fútbol para equilibrar gastos. En el caso de Vodafone, los británicos abonaron 318 millones en su último ejercicio fiscal. Necesitarían que sus 1,3 millones de clientes pagaran 20 euros al mes.

El caso de Orange es similar con unas cifras muy parecidas a la de Vodafone. Evidentemente, este escenario no se va a producir en ningún caso, por lo que sería necesario un pago mensual mayor por parte de los clientes para equilibrar gastos. Eso los ha llevado a plantearse el seguir con el fútbol, aunque realizarán un intento a la baja. Mientras tanto, Mediapro se prepara para que beIN Sports viva sin los operadores…