El PC gaming está creciendo, y es en parte gracias a los youtubers. En las videoconsolas tenemos que conformarnos con capturadoras de vídeo para grabar lo que estemos jugando, pero en ordenador podemos hacer uso de programas que se encargan de hacerlo totalmente gratis. Y el caso que nos ocupa es más interesante aún, porque graba las partidas de forma automática nada más empezar, detiene la grabación en cuanto termina la partida, y tiene algunas otras funciones automáticas igual de interesantes o todavía más.

Si te gusta grabar las partidas en PC, probablemente hayas oído hablar de OBS, del software nativo de Windows 10 o del que ofrece NVIDIA para sus gráficas. El que nos ocupa se llama Plays.tv, y tiene dos argumentos a su favor: automatización y simplicidad. En cuanto a lo segundo, configurar la calidad de la grabación es tan fácil como escoger entre niveles predefinidos, o sencillamente ajustar la resolución y el bitrate, entre otros parámetros bastante simples. Más allá de esto, lo más interesante de este software para capturar vídeo de la pantalla está en sus opciones de automatización.

Plays.tv graba tus partidas de videojuegos en PC cuando empiezan y acaban de forma automática

La clave de este programa está en que, además de afectar de forma reducida al rendimiento del ordenador a pesar de que cuentes con especificaciones técnicas ajustadas, empieza a grabar automáticamente nada más empezar una partida, y también se detiene por sí solo cuando hemos terminado. Pero si esto te parece poco, además cuenta con un sistema de marcadores automáticos. En juegos como League of Legends, o en Counter Strike: Global Offensive, automáticamente establece en la grabación cuándo se han producido las acciones clave dentro de la partida.

Esto anterior quiere decir que, además de la grabación de vídeo, se quedan marcadores de puntuación, de inicio y fin de una ronda, etcétera. en CS:GO, por ejemplo, se quedan marcados los disparos a la cabeza, o las granadas lanzadas que han impactado. Y en colores alternativos podemos ver los momentos en que estábamos con vida, y cuándo no, y cuándo hemos matado a alguien o nos han matado a nosotros.