Podría decirse que al final, el tiempo pone a cada uno en su sitio. Hace algunos meses, la empresa encargada de desarrollar herramienta de monitorización Retina-X Studios fue noticia. Y lo fue por su funcionamiento un tanto peculiar que finalmente fue destapado por expertos en seguridad. La compañía estaba recopilando información de forma no autorizada de los equipos de los usuarios.

Como softwares de monitorización, realizaban cierta recopilación para garantizar el buen funcionamiento. Algo que estaba dentro de lo comprensible. Sin embargo, la recopilación de datos detectada se consideró abusiva e innecesaria, salvo que se quiera recopilar por alguna finalidad desconocida.

Desde ese mismo instante, los productos de esta empresa desarrolladora de software fueron considerados spyware.

Esto es algo que no estaba confirmado totalmente. Pero un fallo de seguridad en abril del pasado año ofreció las evidencias necesarias para fundamentar las teorías de los expertos en seguridad, basadas hasta ese momento en el comportamiento del software.

Las quejas no se hicieron esperar, y fueron muchas las denuncias recibidas. Sin embargo, el efecto no ha sido el esperado por muchos usuarios. O al menos hasta hace unos días.

Y es que todo parece indicar que, algunos servidores de la empresa Retina-X Studios se han visto comprometidos. El resultado de este fallo de seguridad ha sido el borrado de 1 Terabyte de información recopilada de los equipos de los usuarios de su software.

Desde Retina-X Studios negaban el problema

La primera respuesta por parte de algunas empresas ante este problema es negar lo que parece bastante evidente. Y esto solo puede provocar que te saquen aún más lo colores.

Para fundamentar aún más el hackeo realizado, el ciberdelincuente se registró en la app PhoneSheriff y subió dos fotos. El resultado fue el esperado. Además de las dos imágenes que había subido, en la base de datos hackeada apareció información adicional relacionada con él. Sin ir más lejos, el correo electrónico o la ubicación.

Esto sirve como prueba que se está recopilando mucha más información de la necesaria. Algo que, recordamos, la empresa negaba desde el primer momento.

Son muchos los softwares que, aparentando ofrecer un funcionamiento legítimo, finalmente se convierten en un spyware del que los usuarios no sospechan.

El grupo de hackers que ha realizado el hackeo indica que, entre la información robada, podemos encontrar imágenes, localizaciones, direcciones de correo y demás información almacenada en los dispositivos móviles. La cantidad borrada es ínfima, y seguramente representa un porcentaje muy reducido de la cantidad de información total recopilada.

No es el primer caso similar

Haciendo memoria, nos encontramos con que la empresa mSpy también se vio afectada por un hackeo similar, y justo después de salir a la luz del robo de información que había realizado a los usuarios.

El último caso más sonado fue el de la empresa israelí Cellebrite. En este se produjo el borrado de más de 900 GB, una cifra muy próxima a la de la empresa que nos ocupa en este artículo.

¿Crees que existen más softwares legítimos que realizan este tipo de prácticas? Dejando de lado obviamente los sistemas operativos y las funciones de telemetría que muchos usuarios ya conocen.