Un tribunal europeo dice que no pueden inculpar a operadores WiFi si sus usuarios piratean
Actualmente existe un amplio debate sobre quien es responsable de piratería en una red. Si una persona se conecta a una red WiFi pública y piratea, ¿quién es el culpable, el usuario o el dueño de la red? Mientras que en un hogar se puede argumentar que el dueño debe proteger debidamente su red, en una red pública abierta esto no es así. Ahora, un tribunal alemán ha arrojado nueva luz sobre esto.
Los dueños de las redes WiFi ya no podrán ser culpables si sus usuarios piratean en Alemania
Y es que, mientras que en España compartir contenido sujeto a derechos de autor en redes P2P no es delito ni se puede multar por ello, en Alemania la situación es muy diferente, con multas que rondan los 600 euros si se recibe un tercer strike y se descubre a un usuario pirateando. Esto también ha generado bastantes problemas con establecimientos públicos como cafeterías con WiFi gratis, ya que los usuarios pueden descargar contenido a través de redes P2P y no ser identificados.
En muchos países, los usuarios que cometen ilegalidades son responsables de sus acciones. En Alemania la situación no es tan fácil, ya que un tercero que no tomó parte en una acción de una persona puede ser acusado como responsable de ellas. Esto ha hecho que los clientes que usaban redes WiFi para piratear han generado bastantes problemas a sus dueños.
Esto ha generado que, aunque las multinacionales multimedia tuvieran a quien culpar, muchos sitios directamente decidieran prescindir de ofrecer redes WiFi abiertas. Esto contrasta con planes de la UE a favor del WiFi abierto, como el WiFi4EU para ofrecer redes abiertas de alta velocidad en zonas de interés.
Por fin podrá haber más redes WiFi abiertas sin miedo en Alemania
Por ello, en 2016 el gobierno alemán se vio obligado a prometer que cafeterías y hoteles estarían exentos de pagar los costes legales de los procesos legales si los usuarios habían usado las redes para piratear. En 2017 se aprobó una regulación para dar más garantías, pero aun así los ciudadanos se mostraban reticentes por miedo a que la UE les multase.
Por suerte, el Tribunal Supremo alemán ha decidido que la legislación aprobada en 2017 es compatible con las leyes europeas, lo cual le da inmunidad a los operadores WiFi sobre los actos que los usuarios lleven a cabo en esas redes.
El caso viene desde 2013, cuando un hombre tenía varias redes WiFi abiertas, y en una de ellas un usuario se descargó el juego Dead Island. Deep Silver, sus creadores, le exigían 1.000 euros de multa para hacer desaparecer una supuesta demanda argumentando que quienes ofrecieran esos servicios debían encargarse de bloquear el tráfico P2P o las webs que permitían obtener los enlaces (como si esto último fuese a hacer algo).
En 2016, la UE determinó que los proveedores de redes WiFi no podían ser responsables de los hechos de terceros a través de sus redes WiFi. Ahora, este nuevo caso irá al Tribunal de Justicia de la Unión Europea para conocer la decisión final.
Via: www.adslzone.net