Muchos son los grupos y organizaciones que, con el paso de los años, en concreto desde hace ya más de una década, se han ido formando para, junto a los propietarios de los derechos de autor, intentar acabar con la creciente tendencia pirata.

Sin embargo y debido a la experiencia adquirida en todo ello, estos grupos poco a poco se han ido dando cuenta de que para intentar acabar, o al menos lograr que disminuya la piratería, no se pueden centrar solo en los portales con ficheros torrent ilegales, o en los sitios streaming. Para ello deben «atacar» elementos en principio ajenos a todas estas tendencias ilícitas, pero que sirven como medio para acceder a los contenidos pirata.

Aquí es donde entran en juego elementos tales como los proveedores de Internet, las plataformas sociales, los servicios de almacenamiento en la Nube, los fabricantes de ciertos dispositivos, o los propios buscadores generalistas. Y precisamente es en estos últimos de los que os vamos a hablar, ya que servicios on-line de este tipo, sector que está claramente encabezado por el gigante Google, están recibiendo cada vez más presiones por parte de estos grupos para que no enlacen a portales con contenidos ilícitos, o sitios web que llamen a los mismos.

A veces luchar contra la piratería se vuelve en contra de los grupos implicados

Sin embargo, tal y como ya ha sucedido en muchas ocasiones estos últimos años, hay sitios y servicios de Internet que ofrecen contenidos en forma de vídeos y que al mismo tiempo luchan contra la piratería, que han visto cómo esas medidas que han solicitado que se tomen contra los sitios ilegales, se vuelven en su contra. Y volvemos a los buscadores como Google, que tienen que lidiar con millones de peticiones constantes referentes a la retirada de enlaces «sospechosos», por lo que se puede decir que hacen lo que pueden.

Y es que a pesar de las tecnologías que se han venido desarrollando e implementando para que los buscadores puedan localizar y bloquear los sitios web acusados de infringir los derechos de autor, los métodos actuales no son, ni muchos menos, infalibles. Es por ello que estamos viendo cómo muchas de estas compañías que quieren acabar con los servicios ilegales debido a que ellos ofrecen contenidos de manera ilícita, ven cómo sus enlaces son igualmente eliminados de las búsquedas de sitios como Google o Bing, lo que perjudica claramente a su negocio.

A pesar de que estos buscadores que de manera indirecta se han visto implicados en la «lucha», generalmente defienden la libertad de Internet, pero a menudo y debido a ciertas presiones legales, se ven obligados en cierta medida a ir en contra de sus principios. Es por ello que tampoco es de extrañar que este tipo de bloqueos no se encuentren entre sus prioridades empresariales, de ahí posiblemente, los errores que se comenten en estas acciones al intentar acabar con los enlaces pirata.