El FBI cierra 15 webs para encargar ataques DDoS
La Navidad es un periodo en el que, históricamente, aumenta el nivel de ataques DDoS, sobre todo con plataformas relacionadas con los videojuegos. En los últimos años hemos tenido casos sonados que todos recordamos y que han dejado a millones de usuarios fuera de juego en estas fechas en las que muchos disfrutan de unos días de vacaciones. Sin embargo, es posible que la Navidad de 2018 sea más tranquila de lo esperado después de que el FBI haya informado del cierre de 15 páginas webs para encargar ataques DDoS que permitían a los usuarios pagar una cierta cantidad de dinero por este tipo de amenazas.
El FBI ha tomado hoy cartas en el asunto para cerrar 15 páginas web que permitían encargar ataques DDoS a la carta contra otras páginas web, servidores de juego o servicios online. Como sabemos, los ataques DDoS o distributed denial-of-service attack (ataque de negación de servicio distribuido, en castellano) genera un gran flujo de información desde varios puntos de conexión hacia un punto de destino, lo que termina saturando el servicio por el número de peticiones imposible de controlar.
En 2018 se registró un récord de ataque DDoS de 1.7 Tbps gracias a la técnica Memcached. Este método se usa como reflector de los ataques con un factor de amplificación de más de 50.000 veces, pudiendo convertir una solicitud de 203 bytes en una respuesta de 100 megas sin problemas. El ataque fue registrado por la compañía Arbor Networks.
15 webs para encargar ataques DDoS cerradas por el FBI
Hoy el FBI ha terminado con 15 servicios DDoS-for-hire (también conocidos como stressers o booters), que son básicamente páginas web que permiten a cualquiera con un medio de pago válido el poder encargar uno de estos ataques contra un determinado objetivo. En el caso de los booters, suelen ofrecer ataques DDoS no demasiado potentes ni devastadores, pero por cantidades de dinero irrisorias.
El FBI ha señalado que ha comprado todos estos servicios y ha determinado que son capaces de actuar sobre las redes de comunicaciones. A nivel de pagos, muchos de ellos utilizaban el Bitcoin, la famosa criptomoneda que les permite refugiarse en el anonimato de sus transacciones.
Precisamente, el pasado día 11 detuvieron a una organización que vendía en la Dark Web casi todo lo ilegal que existe. En los 300 registros realizados en noviembre se incautaron drogas, armas de fuego, cuchillos, nunchakus, móviles, ordenadores que gestionaban direcciones de Bitcoin, y hardware destinado a minar criptomonedas.
Via: www.adslzone.net