La manera en la que vemos vídeos o escuchamos música hoy en día ha cambiado mucho respecto a hace unos años. Antes, y para esto no hay que remontarse a muchos años atrás, prácticamente todos los vídeos que veíamos era en la televisión, ordenador u otro dispositivo. Ya sea en directo o a través de vídeos en alguna unidad o cinta. Pero ahora esto ha cambiado. Ahora simplemente podemos ver vídeos a través de Internet, independientemente del dispositivo. Se cargan a través de la red y necesitamos una conexión aceptable para que funcione. Lo mismo ocurre con la música. Pero claro, no siempre funciona como debería. Por ello vamos a dar algunos consejos para ver vídeos y escuchar música en streaming y evitar que se corte.

A nadie le gusta estar escuchando música y que se corte constantemente. Lo mismo si estamos viendo un vídeo y tarda en cargar, se corta, etc. Hay veces que el problema puede escaparse de nuestra mano, pero en otras ocasiones podemos tener ciertas recomendaciones en cuenta para evitarlo.

Cómo evitar problemas al reproducir vídeos o escuchar música en streaming

Quizás los problemas más frecuentes sean a la hora de reproducir vídeos en streaming. Un ejemplo es YouTube, una de las plataformas más populares. Puede que estemos intentando ver un vídeo y se corte constantemente, no cargue bien, etc. Hay algunas cosas que podemos poner en práctica para mejorar esto.

Comprobar que nuestra conexión funciona bien

Algo básico y que debemos de tener en cuenta es contar con una conexión estable y que funcione correctamente. Hay que observar que nuestra cobertura es la idónea. Si es necesario podemos hacer un test de velocidad. A veces nuestros vídeos no cargan correctamente por una pobre calidad de la señal.

Hay que comprobar que nuestro dispositivo sincronice correctamente con el router, que no haya otros equipos que estén consumiendo ancho de banda en exceso, etc.

Precargar el vídeo siempre que sea posible

Algunos servicios para reproducir vídeos en streaming permiten precargar el vídeo. Esto significa que se descarga el contenido, ya sea en su totalidad o de manera parcial, para posteriormente reproducirlo. Esto es interesante si nuestra conexión no es la adecuada y vemos que se corta constantemente. Es posible que al precargar el vídeo y luego reproducirlo podamos evitar estos inconvenientes.

Tener en cuenta la calidad de la imagen y de sonido

La calidad de imagen puede ser determinante. En plataformas como YouTube podemos reproducir vídeos desde 144p hasta 4K, pasando por varios tipos. La peor calidad de imagen significa que necesitamos una conexión menos potente y habrá menos dificultades para cargar el vídeo. Si optamos por la máxima calidad, los requisitos aumentarán considerablemente. Hay que intentar buscar un término medio según las circunstancias.

Algo parecido ocurre con la música. En ocasiones podemos modificar la calidad del sonido. Es cierto que no influye tanto como en los vídeos, pero puede afectar también.

Actualizar el navegador o aplicación

No podemos dejar de lado el propio navegador o aplicación que utilicemos para reproducir los vídeos. Es muy importante que estén actualizados a la última versión. De esta forma el rendimiento será mayor y seguro que habrá menos problemas a la hora de reproducir vídeos en streaming.

La seguridad, vital

Con esto nos referimos a la seguridad de nuestras redes y de los propios dispositivos. Es importante que cuenten siempre con programas y herramientas de seguridad y estén libres de virus y amenazas. De esta forma la calidad y el rendimiento serán mayores.