Estos Son Los Diferentes Tipos De HDMI Que Hay En El Mercado
Prácticamente, todos los aparatos audiovisuales cuentan con un cable HDMI. Se ha convertido en la forma de conexión estándar para imagen y sonido, tanto en reproductores, televisores, consolas, ordenadores, etc. Todo el mundo tiene uno en casa porque lo necesita debido a sus compatibilidades. Pero hay que tener en cuenta que hay diferentes tipos de HDMI en sí.
Por eso, puede que a la hora de comprar un HDMI os surjan dudas sobre qué opción es la que debéis comprar para cada ocasión. El cable HDMI destaca por el uso de vídeo digital de alta definición, así como audio digital multicanal en un único cable, ya que antes, el audio se sacaba mediante otra fuente. Vamos a profundizar en los diferentes tipos de cable que hay y en las funciones que ofrecen todos y cada uno de ellos.
¿Qué es un cable HDMI?
Lo primero que hay que tener en cuenta es que las diferencias no son demasiado significativas para la mayoría de usos. Aunque se ha ido ajustando con los años, lo ideal también resulta que la longitud del cable no supere los dos metros, ya que a mayor recorrido, mayor calidad de imagen se puede perder por el camino. Puede ocurrir ya que se trata de una transmisión de datos digital. No es lo habitual, pero es innecesario adquirir un cable largo salvo que no os quede otro remedio.
En este punto no es óbice recordar que puede ser aconsejable darle preferencia a un cable HDMI con los conectores dorados. Así nos aseguraremos de que, si el ambiente es húmedo, la corrosión no afectará a nuestro accesorio y a los dispositivos en los que está conectados. Eso sí, al contrario de lo que mucha gente cree, un cable bañado en oro no mejora la calidad de imagen.
El cable HDMI está diseñado para soportar vídeos en alta definición desde que fue concebido, permitiendo resoluciones 480i, 480p, 576i, 576p, 720p, 1080i, 1080p, 1440p. Y ahora también es el medio para alcanzar resoluciones 4K y 8K.
¿Cuántos tipos de cable HDMI hay?
La diferencia entre los cables HDMI (High Definition Multimedia Interface) se basa en dos aspectos. Encontramos tres tipos de conectores diferentes: estándar, mini o micro. Todos ellos tienen salida macho-macho (aunque pueden ser de distintos tamaños de conectores) y las diferencias radican en el tamaño de las mencionadas entradas.
El conector estándar, también conocido como de tipo A incluye 19 pines y es el más utilizado, especialmente en teles, videoconsolas o cualquier otro tipo de sistema. Suelen, de hecho, venir incluidos para facilitar la vida del usuario. El conector mini o de tipo C está diseñado para utilizar, principalmente, en cámaras de vídeo. Como su propio nombre indica, es más pequeño. El conector micro o de tipo D es el más pequeño y también suele ser el utilizado en cámaras de vídeo o fotográficas. También hay un HDMI tipo E, aunque solo está diseñado para la automoción, que está creado para evitar desconexiones por golpes o vibraciones en el interior del vehículo.
En los últimos meses se ha ido definiendo un nuevo tipo de cable HDMI, aunque por el momento su uso no se ha generalizado. Se trata de un conector denominado tipo B, que posee 29 pines para llevar un canal de vídeo expandido en pantallas de alta calidad, para poder ofrecer resoluciones mayores a 1080p. Probablemente, cuando empiecen a llegar las teles o consolas con 8K, durante la próxima generación, imperarán este tipo de conectores.
Diferentes versiones de HDMI
Desde 2002, cuando llegó al mercado el primer HDMI, que era básicamente unir DVI en una única conexión con audio, comenzó un legado que ha ido evolucionando con el tiempo. Los cables HDMI han tenido diversas versiones con modificaciones hasta la fecha. Desde el primero, el HDMI 1.0, hemos ido pasando por diversas actualizaciones. Repasamos lo que añadía cada una de ellas.
- HDMI 1.0: Con ella llegó el HDMI, que destacaba por aunar en un solo cabel de conexión digital los formatos audio/vídeo.
- HDMI 1.1: La única diferencia con respecto a la versión 1.0 es que incluía soporte para DVD Audio.
- HDMI 1.2: La revisión del cable añadía soporte para One Bit Audio, usado en Super Audio CD, con hasta ocho canales, permitiendo seleccionar resoluciones personalizadas.
- HDMI 1.3: Se incrementó el ancho de banda a 340 HMz. Además, se añadió soporte para Dolby TrueHD y DTS-HD, formatos de audio usados en HD-DVD y Blu-ray Disc. Consolas como PS3 fueron las primeras en acogerse a este tipo de cables.
- HDMI 1.4: La resolución pasa de FullHD a XHD permitiendo resoluciones de 4096 × 2160 píxeles (24 imágenes por segundo) o de 3840 × 2160 a (30 imágenes por segundo). La actualización también ofrecía mejoras en el soporte de colores para dotarlos de un mayor realismo, así vídeo de alta definición en movimiento que permite mantener la calidad de imagen. Otra novedad significativa es que también permite enviar y recibir datos por medio de una conexión Ethernet incorporada en el propio cable, capaz de alcanzar velocidades de hasta 100 Mb/s.
- HDMI 2.0: La nueva generación de cables HDMI ofrece un incremento de ancho de banda que alcanza los 18 Gbit/s. Además, incluye soporte 4K, relación de aspecto 21:9, 32 canales de audio, entrega simultánea de dos streamings y extensiones de comandos CEC para controlar múltiples dispositivos desde un punto único.
- HDMI 2.1: La última revisión incrementa el ancho de banda hasta los 48 GB/s y permite resoluciones de hasta 10K. Además, se incluye soporte HDR dinámico y a nuevas tasas de 60 Hz para 8K y 120 Hz para 4K.
¿HDMI 2.0 o HDMI 2.1? ¿Cuál realmente te hace falta?
Como veis, hay diversas opciones en cables HDMI. Saber para qué lo vamos a necesitar es clave para saber cuál comprar. Si tenemos una TV que no alcanza resoluciones en 4K o en 8K, sería absurdo comprar el modelo 2.1 de HDMI. Funcionará, sí. Pero el haremos un gasto innecesario, ya que tienen un mayor precio debido a las mencionadas funciones referentes a la resolución, a las cuáles no vamos a sacar partido. Puede adquirirse como visión de futuro, pero con lo rápido que avanza la tecnología, quizás nunca lo amorticemos tanto como para mantenerlo hasta adquirir una nueva TV.
Si vuestras teles, monitores, consolas o equipos son capaces de alcanzar 4K con HDR, tendríais que ir directos a por un cable 2.0 o 2.1, ya que sin un cable HDMI de estas características, aunque tengáis la mejor televisión del mundo, no podréis alcanzar dichas resoluciones o el resto de ventajas que ofrece, por ejemplo, el cable 2.0 (relación de aspecto 21:9, 32 canales de audio, entrega simultánea de dos streaming…).
La duda entre escoger entre un cable HDMI 2.0 o un 2.1 es, en este momento, relativamente sencilla. El 2.1 tiene soporte para HDR dinámico, ajustando el color y la iluminación frame a frame. Es capaz de dar soporte resoluciones de hasta 10K, pero de momento, pocas televisiones o equipos son capaces de alcanzar tal cifra.
La tendencia del mercado está tratando de plasmar que el 8K será la resolución estándar durante los próximos años. Ya hay televisores que ofrecen este servicio, aunque sus precios son un tanto prohibitivos. Algo que se irá ajustando en los próximos años, en cuanto comiencen a crearse películas o videojuegos en dicha resolución. Por ejemplo, Sony ha confirmado que su próxima PS5 será capaz de alcanzar 8K, aunque no especifican si de forma nativa o mediante un reescalado.
Si soléis ser de las personas que se pegan caprichos, quizás queráis un cable HDMI 2.1 con vistas a los dispositivos del futuro. Actualmente, no hay demasiado mercado para lo que ofrece.
Via: www.adslzone.net