La UE Se Acerca A Trump Y Revela Lo Que Le Da Miedo Del Despliegue Del 5G
La batalla comercial entre Trump y China, al menos en el mundo de la telefonía, no sólo afecta a la posibilidad de que las marcas tengan o no Android en sus terminales. Realmente, uno de los puntos más candentes, y quizás el más importante de toda la situación, es la predominancia de empresas chinas en el mercado de los proveedores de componentes y servicios para los despliegues de las redes de comunicaciones de las operadoras. Sin contar la importancia, en este sentido, para la competitividad de empresas europeas como Ericsson.
Mientras se cocía toda esta polémica al otro lado del Atlántico, donde las ofertas de redes de nueva generación ya llevan tiempo en marcha y en un buen puñado de operadoras, la duda a este lado era ¿qué va a pasar con el 5G? En España, empresas como Vodafone ya han lanzado sus primeras conexiones 5G NSA y, tras el reparto del nuevo dividendo digital, en 2020 llegarán las primeras redes 5G SA, lo que para muchos es la verdadera quinta generación móvil real. En todo este maremagnum nos encontramos cuando la UE se ha encontrado con una importante papeleta. Tiene aún que establecer las especificaciones legales de lo que será el 5G y, además, posicionarse en la guerra entre EE.UU. y el gigante asiático.
La UE toma partido: uno de los riesgos que ve en el 5G son las empresas chinas
Hace unas horas que la reticencia de la UE a tomar partido por uno u otro bando ha sido superada y a través de un informe de riesgos, creado a partir de las aportaciones de comisiones de todos los países miembros, sobre el 5G lo deja bastante claro: uno de los problemas que les preocupan son los proveedores de «fuera de la UE» o «representantes de un país» para el despliegue de la Red. De esta forma, y con este bonito eufemismo para no decir Huawei o ZTE, desde Bruselas dan su brazo a torcer y se sitúan en el bloque occidental, quizás no al mismo nivel que Trump, pero dentro de su campo.
El informe, adentrándonos en su contenido, identifica una serie de «retos para la seguridad» que se acentuarán con la llegada de las redes 5G, así como del software y las aplicaciones que las facilitarán y se ejecutarán sobre ellas. El rol de los proveedores también se indica como un punto de riesgo y se hace una especial mención al problema de contar con un «alto grado de dependencia de algún proveedor en particular».
Otros puntos que destaca el informe indican posibles riesgos de las redes 5G como:
- Una mayor exposición y más puntos potenciales de ataques cibernéticos, ya que la dependencia de las aplicaciones que se desarrollen sobre ellas será mayor.
- Dadas las nuevas y particulares características de las redes 5G, ciertas piezas de equipamiento o funciones serán más sensibles.
- Una mayor exposición a los riesgos relacionados con la dependencia de los operadores móviles de los proveedores de Red.
- Las amenazas a la disponibilidad e integridad de la web, especialmente en términos de confidencialidad y privacidad.
Ya sabemos los riesgos ¿se va a hacer algo para mitigarlos?
Pues la fecha, al menos, para poner medios y que estos miedos no lleguen a ser verdaderos problemas es el 31 de diciembre, cuando el Network & Information Systems Cooperation Group tiene que desarrollar una serie de herramientas de mitigación y recomendaciones, a nivel de la UE y de los países miembros, para cada Estado en la materia.
En este sentido, se apoyará en muchas de las que ahora mismo están presentes para redes 3G y 4G, aunque ya han indicado que las diferencias fundamentales de la operativa en el caso de las redes 5G hará que no sean suficientes o totalmente efectivas, por lo que es necesario desarrollar algunas herramientas propias para las redes de nueva generación.
Lo cierto es que, simplemente, la presencia o no de un proveedor no es tampoco el problema, para la UE, la seguridad de las redes 5G presenta un problema a muchos niveles cuando tenemos el lanzamiento de las mismas a menos de un año vista.
Via: www.adslzone.net