El coronavirus de Wuhan, ahora bautizado como COVID-19, ha provocado un auténtico revuelo en todo el mundo. Ya son más de 1.800 los muertos, y hay muchísimas empresas que se están viendo afectadas de una u otra manera por la reducción de actividad en China. Y no sólo es Apple la que se va a ver afectada, sino que toda la industria caerá según ha revelado un informe.

El informe ha sido elaborado por TrendForce, que analiza precios y niveles de ventas de todo producto tecnológico, incluyendo móviles, DRAM, NAND, ordenadores, etc. En él detallan que hay industrias que están menos afectadas que otras debido sobre todo a que tienen un grado de automatización mayor. Por desgracia, todos los productos tecnológicos caerán en varios millones de unidades distribuidas para el primer trimestre de 2020.

Por ejemplo, se venderán 2,3 millones menos de relojes inteligentes, y 33 millones menos de móviles. En portátiles, la segunda caída más acusada en términos porcentuales, habrá 4,3 millones de unidades menos. Como vemos en la tabla, básicamente todo caerá tras haber revisado las previsiones para este trimestre.

En los semiconductores, a pesar de la automatización, hay muchos trabajadores que no pueden ir a las fábricas por las restricciones de tráfico. La cantidad de unidades fabricadas, por tanto, caerá.

En cuanto a la memoria, empresas como Samsung o SK Hynix tienen plantas en China, pero no están afectadas por el brote además de estar altamente automatizadas. Además, tienen stock suficiente desde las compras que hicieron antes del año nuevo. Los precios, de momento, se espera que suban ligeramente para la DRAM y la NAND Flash que usan móviles y ordenadores para los chips eMMC y SSD. No ha habido retrasos en los envíos, y curiosamente China ha aumentado las demandas de servidores por la cantidad de gente que está estudiando o trabajando desde casa.

En cuanto a paneles, algunos fabricantes de Smart TV están teniendo escasez de trabajadores y de algunas piezas clave, lo que está reduciendo la capacidad de fabricación, donde Wuhan es una de las zonas de China que más paneles LCD fabrica. El precio de los paneles de TV, por tanto, subirá, mientras que el de monitores y portátiles es incierto por no saber si la actividad volverá a retomarse en la segunda mitad de febrero.

La producción de cables de fibra óptica, gravemente afectada

La fabricación de cables de fibra óptica puede verse afectada también, ya que en Wuhan hay empresas como Fiberhome, YOFC y Accelink, que, junto a otras, representan el 25% de la producción de cables de fibra óptica de todo el mundo. Se espera, por tanto, que haya retrasos en el despliegue de 5G en China porque se necesitan de cables de fibra.

En bombillas LED también está habiendo algunos problemas de producción porque no todos los trabajadores se han reincorporado. En el caso de las baterías no ha habido ningún problema porque los componentes vienen de países diversificados como Japón, Corea del Sur y Estados Unidos en su mayoría.

La parte que más se va a ver afectada junto a la fibra óptica serán los paneles solares fotovoltaicos. Mucha materia prima viene de China, y Taiwán sólo tiene stock hasta finales de febrero. Algunos fabricantes pueden sobrevivir con sus fábricas en el sureste de China, pero las que no estén diversificadas se verán altamente afectadas. En general, habrá retrasos en la instalación de estos paneles en Europa, China y Estados Unidos, retrasándose del primer al tercer trimestre.

Apple ya ha comunicado que van a vender menos de lo esperado

Los wearables y móviles también se han visto altamente afectados, ya que requieren de mucha mano de obra y un complejo proceso productivo. Apple se verá afectada por esto, y ha anunciado que espera ingresar menos debido al parón que está sufriendo en China, donde fabrica todos sus iPhone, iPad y Apple Watch. La producción de móviles puede llegar a caer a niveles de 2016.

Los altavoces inteligentes están sufriendo también las causas de las restricciones de tráfico, y muchos no pueden ser enviados. Las consolas de momento no se ven afectadas porque hay baja demanda ahora mismo, además de que la producción de PS5 y Xbox Series X no empezará hasta finales de primavera como pronto, por lo que de momento no afecta al sector de los videojuegos.

En definitiva, vemos que habrá una gran caída en toda la industria, pero ésta se mantendrá a flote. Si el brote no se frena a partir de las dos próximas semanas, el segundo trimestre de 2020 podría arrojar datos aún peores.