La compra de Twitter por Elon Musk en 2022 supuso una señal para muchos usuarios de la red social, que a fuerza de cambios y decisiones polémicas han ido planteándose a lo largo de los últimos meses si ha llegado el momento de plantearse un cambio, y ha supuesto una ventana de oportunidad para el crecimiento de usuarios en otras soluciones y la aparición de nuevas propuestas: Threads (la red social de Meta), Mastodon o Bluesky (creada por Jack Dorsey, exCEO de Twitter) son algunos ejemplos de esta tendencia en pleno crecimiento.


Una de las características compartidas por todas estas nuevas propuestas es su orientación descentralizada, su apuesta por garantizar a los usuarios que serán dueños de las publicaciones e interacciones que éstos generan en la red, que podrán escoger incluso los algoritmos que definen cómo se presentará la información en sus aplicaciones (sin el control que a día de hoy establecen los proveedores de estas plataformas, como Twitter/X, de forma unilateral).

Hablamos de la evolución hacia Web3, un enfoque abierto, público, un cambio de paradigma en el sector, el surgimiento de una nueva generación de aplicaciones y servicios que podrán acceder de forma libre a todos los datos de la red, creando nuevas nuevos modelos de negocio imposibles en la era Web2 donde las empresas que ofrecían estos servicios tenían el control absoluto. El propio World Economic Forum destacaba al inicio de 2023 el auge de las redes sociales descentralizadas como una de las tendencias que más rápidamente podrían tangibilizarse y aportar valor dentro del ámbito de Web3.

Algunas de estas redes sociales alternativas, como Mastodon, se basan en un modelo federado, funcionando de forma descentralizada mediante el protocolo ActivityPub (estándar definido por el Social Web Networking Group del World Wide Web Consortium) que posibilita trabajar con servidores independientes gestionados por los propios usuarios de la red. 

Otras alternativas, como Threads, han trasladado ya su intención de adoptar ActivityPub para facilitar la interoperabilidad entre redes y hacer posible en el futuro que los usuarios puedan incluso migrar sus cuentas y seguidores a otras aplicaciones compatibles, sin perder toda el contenido y actividad generados en la red original, facilitando así que no se encuentren cautivos por el impacto que supone empezar de cero al cambiar de plataforma.

Esta tendencia clara hacia redes sociales descentralizadas va un paso más allá gracias a varias propuestas, surgidas en 2022, que basan su arquitectura en redes de Blockchain, y que no sólo plantean como objetivo proporcionar al usuario mayor control sobre sus datos y facilitar el desarrollo de aplicaciones y servicios que accedan libremente a la información, sino también aprovechar las características diferenciales que ofrecen este tipo de tecnologías de forma nativa para crear nuevas soluciones y dar respuesta a necesidades como la monetización de los contenidos generados por los usuarios.

Figura 4: Libro dedicado a "Bitcoin: La tecnología Blockchain y su investigación" de Yaiza Rubio y Félix Brezo

Entre estas soluciones podemos destacar Lens, un protocolo de redes sociales descentralizado creado por el fundador de Aave, uno de los gigantes de las finanzas descentralizadas. En la actualidad la red se encuentra en beta cerrada, con más de 121.000 usuarios que han accedido exclusivamente por invitación, y que hasta el momento han generado unos 5 millones de publicaciones. Podéis leer más sobre Lens en el artículo de la academia de Bit2Me.

Lens: Solución Web3  

Lanzado en 2022 en medio de la explosión de los NFT, Lens aprovecha plenamente el estándar de Token No Fungible (ERC-721) para construir un ecosistema descentralizado. Cuando creas un perfil de Lens, se crea como un NFT en tu wallet. Cuando sigues a alguien, creas un NFT “seguidor" en la cadena. Y así sucesivamente cualquier publicación que hagas o compartas queda registrada OnChain y públicamente accesible, sin posibilidad de modificación o censura.

Lens separa así el plano de datos, identidad y gestión (que está desplegado sobre la red de Polygon utilizando smart contracts) de las aplicaciones y servicios que permiten publicar o consumir la información, haciendo imposible que sus creadores tengan la capacidad de controlar la información que sus usuarios pueden conocer o publicar, y dando así a los usuarios la libertad de elegir cómo quieren interactuar en la red social en función de sus preferencias. 

Por ejemplo, podemos utilizar Lenster para escritorio y Orb en el smartphone, completamente independientes, que nos permiten acceder a la misma información aportándonos distinta experiencia de usuario, funcionalidades, opciones de configuración, etc sobre una base común ofrecida por el protocolo de Lens.


Cabe destacar, frente a las redes sociales tradicionales e incluso otras alternativas como Mastodon, Threads o Bluesky, la inclusión por defecto en Lens de opciones para monetizar los contenidos que se generamos, así como recompensar a los usuarios que hacen difusión e interaccionen con nuestras publicaciones. Esto es posible mediante una nueva función ofrecida por el protocolo Lens denominada “collect”, que se añade a las habituales en redes sociales (like, comment, repost) y que permite a cualquier usuario de la red obtener un NFT de una publicación, pagando en tokens. Este mecanismo permite crear nuevos modelos de negocio y atraer a esta red a todos aquellos usuarios que buscan una forma directa de obtener retorno por su actividad.

En la siguiente imagen podemos ver un ejemplo de las opciones que tenemos para monetizar una publicación en Lens. Cada usuario que coleccione esta publicación como NFT en las próximas 24 horas deberá pagar 1$ (en USDC), pudiendo obtener además una recompensa del 5% de las comisiones obtenidas si colabora con la difusión del post y otros usuarios coleccionan también la publicación.


A lo largo de 2023 Lens ha sido muy activo en el ecosistema Web3 (por ejemplo, con presencia destacada en los hackatones organizados en las distintas Ethereum Community Conference celebradas hasta el momento) para fomentar la creación de una comunidad de desarrolladores que construyan todo tipo de servicios basados en esta arquitectura, conectando las capacidades de Lens con soluciones Web3 y Web2, datos dentro y fuera de la cadena, etc gracias a las APIs, SDKs y herramientas existentes en Lens.


De esta forma se han desarrollado ya alternativas a Reddit, Pinterest, Youtube, Spotify… y aplicaciones específicas para el ámbito Web3 que utilizan como base la infraestructura proporcionada por Lens, y se han incorporado funcionalidades adicionales a los clientes existentes de la red social (por ejemplo, integrando con servicios financieros descentralizados). Como muestra de esta actividad, Lenster, la aplicación más utilizada en esta red, es la que más estrellas tiene en Github de todos los repositorios existentes de soluciones Web3, incluso por encima de la librería web3.js.


Esta actividad se ha visto incentivada también con la financiación de proyectos mediante “grants”, que se ha visto incrementada en los últimos meses gracias a los 15 milllones de dólares obtenidos en la ronda de inversión levantada por Lens en el mes de Junio.

Desde un punto de vista técnico y de negocio el hecho de optar por una solución basada en Blockchain, donde los datos se almacenan OnChain (lo que implica el pago de comisiones de red en cada interacción) tiene un impacto directo en el coste y la escalabilidad, en un momento donde no está claro el modelo de negocio que podrá sustentar la red de forma sostenida en el tiempo. Debido a ello, en el mes de Abril Lens inició la evolución de la red hacia una solución de escalabilidad, bautizada como Momoka, una nueva arquitectura (L3 de tipo Optimistic rollup) que permitirá incrementar significativamente el rendimiento y reducir los costes sin sacrificar la visión descentralizada.


Lens se enfrenta a un entorno fuertemente competitivo para capturar volumen de usuarios, compitiendo con soluciones como Mastodon, Threads o Bluesky, más generalistas, que continúan su crecimiento de usuarios, así como con alternativas “nativas” del ecosistema, como Farcaster, que pelean directamente por atraer a los usuarios ligados a este entorno Web3. 

¿Veremos la consolidación de esta red social descentralizada en los próximos meses, convirtiéndose en una de las primeras soluciones Web3 de éxito? El tiempo nos dirá…

Saludos,